Una persona puede sentirse confundida sobre su identidad sexual y, por tanto, necesitar asesoramiento psicológico para comprender mejor cómo se siente, y también puede necesitar apoyo en el proceso de afirmación de género.
Las necesidades de las personas transgénero varían de una persona a otra, y no todas necesitan un proceso médico de afirmación de género (antes también llamado transición). Algunas personas transgénero llevan a cabo un proceso de afirmación de género sólo socialmente, como cuando una persona se presenta de acuerdo con su identidad de género (por ejemplo, una persona que se identifica como mujer y lleva ropa femenina) y/o cambia su nombre en sus documentos. Cuando una persona transgénero sigue una terapia hormonal y/o decide proceder con la cirugía para acercar su cuerpo a lo que siente, el proceso de afirmación de género también es médico. En este caso, se recomienda que la persona acuda a un centro con profesionales especializados en salud transgénero. Infotrans.it ofrece una lista de centros en todo el país que pueden prestar este tipo de servicio en la sección “Mapa de servicios”. Es importante recordar que para ser aceptada la persona necesita firmar un consentimiento informado.
Normalmente, el primer profesional con el que se encuentran las personas transgénero es un psicólogo o psiquiatra. Esto no se debe a que las personas transgénero tengan una enfermedad mental, sino a que puedan necesitar ayuda profesional de este tipo por diversas razones. Una persona puede sentirse confundida sobre su identidad sexual y, por tanto, necesitar asesoramiento psicológico para comprender mejor cómo se siente. Puede que no se acepten a sí mismos, o que tengan dificultades para abrirse a su familia, amigos o en el trabajo (la llamada fase de salida del armario). En general, una persona transgénero puede necesitar apoyo psicológico para afrontar situaciones delicadas y también para reflexionar sobre qué camino es el mejor para sentirse bien. Además, es importante que la persona que desee someterse a una terapia hormonal o a una intervención quirúrgica tenga los conocimientos adecuados y expectativas realistas. En este sentido, la posibilidad de acceder a un asesoramiento psicológico permite tomar conciencia y decidir con conocimiento de causa sobre las posibilidades que se le ofrecen, examinando los límites y las ventajas de cada elección.
El psicólogo siempre trabaja en estrecha colaboración con colegas médicos que pueden ser psiquiatras, endocrinólogos, ginecólogos o cirujanos. En concreto, puede ocurrir que algunas personas transgénero sufran depresión, ansiedad, trastornos alimentarios o estén en riesgo de suicidio. En estos casos, la labor del psicólogo se realiza en forma sinérgica con la del psiquiatra, que evaluará la necesidad de una terapia farmacológica.
Coleman E, Bockting W, Botzer M, et al. Standards of Care for the Health of Transsexual, Transgender, and Gender-Nonconforming People, Version 7. International Journal of Transgenderism. 2011; 13:165–232.